Llegamos a uno de los momentos del blog que más me está costando escribir. Creo que la Alhambra es uno de los lugares que más me maravilló, por lo que no sé como empezar a comentarles todo lo que recuerdo… Creo que primero les cuento un poco según wikipedia qué es la Alhambra:
La Alhambra es un rico complejo palaciego y fortaleza que alojaba al monarca y a la corte del Reino nazarí de Granada. Su verdadero atractivo, como en otras obras musulmanas de la época, no sólo radica en los interiores, cuya decoración está entre las cumbres del arte andalusí, sino también en su localización y adaptación, generando un paisaje nuevo pero totalmente integrado con la naturaleza preexistente. En 2011 se convirtió en el monumento más visitado de España, recibiendo la cifra histórica de 2.310.764 visitantes.
Hay varios tipos de entradas y formas de recorrer la Alhambra, si mal no recuerdo nosotras hicimos la circular azul. Fuimos de noche a recorrer los palacios Nazaríes y al día siguiente temprano a recorrer los jardines de Generalife y la Alcazaba. (¡Eran tantos nombres y todos tan en andaluz que aún me confundo y tengo que buscar algunas cosas!)Los palacios son simplemente increíbles. Mi primer pensamiento al llegar a la Alhambra fue: «Esto era lo que yo imaginaba». Me sentí transportada hacia otra época, más antigua y más lejana, y me sentí parte de un decorado invisible donde podría ver pasar, con un poco de esfuerzo, parte de la vida diaria de la gente que anteriormente vivía en esta fortaleza. Maravilla, es poco. Ver la cantidad de detalles que hay en paredes y techos te quita el aliento, la majestuosidad y la calidad de los elementos utilizados denotan la opulencia del monarca en ese momento, es algo simplemente digno de ver.
(intentaré no sobresaturarlos de fotos, lo prometo)

La Alhambra de noche

Preciosos detalles en el interior
Durante el día fuimos a pasear a los jardines del Generalife y a la Alcazaba.
El Generalife, el Yannat al-arif en tiempos nazaries, es la villa con jardines utilizada por los reyes musulmanes de Granada como lugar de retiro y descanso. La parte más importante está constituida por sus jardines, fue concebida como villa rural, donde jardines ornamentales, huertos y arquitectura se integraban, en las proximidades de la Alhambra. Fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Me sorprendió ver cuán bien hecho estaba distribuido el asunto del agua, los canales y los regueros estaban puestos de tal forma que parecía que todo se irrigaba solo constantemente. Me llamó la atención también encontrarme con que… ¡Hasta a lo largo de las barandas de las escaleras también corría agua! Lo bueno del asunto, es que había fuentes por todos lados, así en los días de calor se puede soportar mucho mejor la visita.
Y por último en el recorrido, llegamos a la Alcazaba.
La alcazaba constituía la zona militar, centro de la defensa y vigilancia del recinto y con ello fue la parte de construcción más antigua de la Alhambra. Las primeras edificaciones árabes realizadas se corresponden con la época califal, en el siglo XI, ampliándose las mismas al convertirse Granada en capital de uno de los reinos de Taifas.

Vistas desde arriba
Subiendo por las escaleras de la Alcazaba vimos que las barandas estaban del lado derecho, izquierdo si bajas por la misma. Estaban especialmente construidas para poder tomarse con la mano izquierda mientras bajás y con la derecha poder usar la espada (¡bien pensado!) Subimos hasta la parte más alta de la Alcazaba donde se puede obtener una preciosa panorámica de Granada y de la Alhambra y me contaron una frase célebre que me quedó en la memoria:
Muḥammad XII fue el último rey de Granada, conocido por los cristianos como Boabdil o Boabdil el Chico. Se sublevó contra su padre en 1482 y consiguió acceder al trono, aunque seguiría combatiendo con su padre y su tío, quienes también se consideraban legítimos reyes de Granada. Esto favoreció la penetración del ejército castellano y finalmente la toma de Granada por los Reyes Católicos.
Según una extendida leyenda, al salir de Granada camino de su exilio, Boabdil volvió la cabeza para ver su ciudad por última vez y lloró, escuchando de su madre decir:
«Llora como mujer lo que no supiste defender como hombre…»
Me gustó muchísimo conocer la Alhambra, sin contar que quedé completamente fascinada por España (eso es algo aparte de lo que supongo ya se habrán dado cuenta) Me sirvió para conocer un poco más otra cultura y ponerme en sus zapatos por primera vez, lo que me generó una mezcla de sentimientos agridulces. Pero de algo estoy segura, ¡es uno de los lugares que me gustaría volver a visitar antes de partir!
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