Como parte de mi proyecto «El Mundo por Argentina» hoy les paso a comentar un concierto al que pude asistir en el Luna Park. ¡Se trata de una banda coreana llamada SHINee y su paso por Buenos Aires con su gira latinoamericana! El martes 8 de Abril aproximadamente 8500 personas se juntaron en el estadio Luna Park para presenciar este concierto. SHINee forma parte de la empresa SM Entertainment la cual trajo a la primera banda de kpop a la Argentina: Super Junior.

Se va llenando el Luna Park…

Hay algunas cosas que pasan dentro de un concierto de kpop: Primero, la banda generalmente tiene un color asignado por lo cual la gente va con remeras y accesorios de ese color, en este caso el Pearl Acqua (verde agua perlado) también es común llevar Lightsticks o anillos, vinchas, etc que sean luminosas y lleven el color de la banda. Cuando el estadio se pone oscuro y estas cosas brillan se le llama «océano». Los países compiten para lograr el más grande y bello.

Light Pearl Acqua Ocean – Océano verde perlado porteño

Esto es algo hermoso de ver, el estadio a oscuras con todas las luces le dan un toque especial al concierto. ¡Te hace sentir realmente dentro de un mar de ese color!

Momentos después, comenzó el concierto. Y es ahí que no sé por dónde comenzar a describir todo lo que viví. Primero, yo quiero aclarar que no eran fan de la banda (ahora mismo no lo sé, jajaja) y apenas me sabía los temas más conocidos, pero por curiosidad de querer ver un show completo de Kpop fui igual. Ni siquiera sabía cuál era cual, solo sabía que eran cinco. Ahí mismo en el escenario tuve la oportunidad de conocerlos por primera vez. La verdad, estos muchachos tienen tanto talento encima que me dejaron boquiabierta. En la primera canción bailaron con los ojos vendados, ¡eso lo dice todo! Las voces son increíbles y son súper simpáticos en el escenario. Hicieron muchos comentarios que nos hicieron morir de la risa y otros nos hicieron emocionar. Repito, yo no era fan de la banda pero me hicieron sentir como si lo hubiera sido toda mi vida.

Así comenzaba el Show!

Al parecer, ellos estaban muy contentos de estar aquí. Quienes son die-hard fans y siguieron toda la lista de temas de los conciertos en países anteriores me contaron que hubo un tema que cantaron de más que en el resto de los conciertos no lo hicieron y que es la primera vez que se bajan del escenario a bailar y a saludar en Latinoamérica. Pero hay un hecho que sabe todo el mundo: el público argentino es el mejor para los conciertos. Canta, salta, grita y llora todo al mismo tiempo. Para un artista, ¡vivir lo que es el público argentino no tiene precio! Ellos mismos decían que estaban sorprendidos porque cantábamos todas las canciones en coreano con ellos, que es muy dificil de hacer eso, y que estaban contentos de que bailemos también las coreografías con ellos (En especial un tema que se llama «rin ding dong», que si alguna vez viste el MV, la coreografía es muy pegajosa y todos los que estuvimos ahí coincidimos en que el cuerpo se te va solo, jajaja) Nos dijeron muchas cosas lindas, como por ejemplo que estaban contentos de visitar la tierra de messi y el kun aguero, que las argentinas éramos las más lindas, que estaban sorprendidos de cómo cantábamos en coreano, que teníamos muchísima energía y que no se querían ir. Palabras que endulzan los oídos, por supuesto, pero también se notaba el entusiasmo que tenían de estar aquí. Debe ser realmente shockeante llegar a las antípodas del mundo y que 8500 personas conozcan tus canciones y las canten al unísono.

¡Dándolo todo desde el escenario!

(¡Ellos también hicieron de las suyas cantando «la Macarena» en español! jajaja Cr. Cynthia Yang)

También fue el cumpleaños de Jonghyun, uno de los miembros. Le cantamos el feliz cumpleaños y, emocionado, nos pidió si podíamos hacerlo una vez más para poder filmarlo y mostrárselo más adelante a sus hijos cuando los tenga. Que también fue conocido en latinoamérica. Le trajeron un pastel y pudo soplar la vela (en este caso, bengala) también. Un detalle muy emocionante fue que desde los fanclubs de argentina y perú nos dieron una foto y un cartel para levantar en el momento del feliz cumpleaños para que pudiera verlo. ¡Un proyecto muy lindo!

¡El niño feliz con su pastel de cumpleaños!

Y así, entre bailes, risas, juegos, baladas y muchas emociones se pasó la noche y fue momento de volver a casa. Agotada, con la batería de mi cuerpo y mi teléfono casi terminada volví conociendo a 5 personas que dejaron todo en el escenario. La verdad, fue un muy buen concierto y espero que cumplan la promesa de volver a visitarnos. Yo, por mi parte, ¡cumpliré la promesa de seguirlos un poco más de cerca!